Todo lo que deberías leer…
o quizás no
A veces, la vida te lleva a lugares en los que nunca pensaste estar. Sin previo aviso. Sin mapas. Sin señales claras. Solo un giro inesperado y, de repente, ahí estás… dentro de una de esas historias del destino que parecen escritas mucho antes de que lo imaginaras.
No sabes cómo llegaste. No sabes si era el destino, una casualidad… o algo que estaba escrito mucho antes de que lo imaginaras.
Porque hay historias que no buscas, pero ellas te encuentran.
Puede ser una palabra al azar, una canción que te remueve por dentro, un mensaje a deshoras, una mirada que dura un segundo más de lo normal… y de repente, zas, algo cambia.
Algunas historias parecen escritas por el destino.
Otras, pura casualidad.
Y luego están esas que no tienen explicación… o quizás sí.
El destino, la casualidad… y lo que nunca viste venir.
Aquí no solo hay historias. Aquí hay poesía, motivación, giros inesperados, casualidades que parecen señales, relatos que queman, palabras que duelen y otras que curan.
Lo que pasa en El Secreto… se queda en El Secreto. O no.
Porque algunas palabras te abrazan, otras te sacuden, muchas te rompen y muchas más te reconstruyen. Y cuando te quieres dar cuenta, ya no eres la misma persona que empezó a leer.
Cosas que deberías leer… aunque quizás no deberías.
Porque hay textos que te encienden, que te hacen pensar, que te meten en la cama con un personaje o te sacan de la tuya para hacer algo que llevas demasiado tiempo posponiendo.
Por aquí empieza todo… ¿o quizás nunca terminó?
¿Casualidad que hayas llegado hasta aquí? No lo creo.
Lo curioso de las historias es que nunca terminan del todo. Se quedan en algún rincón, esperando a que alguien las descubra, a que alguien las lea… o a que alguien las viva. Y cuando crees que todo ha sido contado, aparece otra palabra, otra señal, otro giro inesperado. Como ahora. Como aquí.